 Todos cabemos en un proyecto de Hogar Nacional, pero seria un hogar humilde en sus principios, y no parece que tal tarea entusiasme a los partidos burgueses que ya existen de forma embrionaria en la oposición cubana y en el exilio. La tarea de mejorar a Cuba (no de reconstruirla como dicen a menudo) es misión de toda su sociedad, no solo de quien logro una visa o anda tras ella. La Cuba profunda no puede mudarse a Miami, ni siquiera a México (con los intelectuales). La Cuba profunda muere de tristeza, y no da discursos polÃticos. Su desgracia es de tipo existencial. Ni la izquierda, ni la derecha tiene nada que ofrecerle a un pueblo que cansado se sienta al borde del camino esperando un milagro que quizás nunca llegue.
La opción derechista para Cuba es la de privatizar prácticamente a todo el estado cubano, establecer un estado de derecho subordinado al mercado, y establecer un capitalismo salvaje que asusta todavÃa demasiado por su crueldad. La izquierdista es más conservadora; dejarlo todo igual, frenar las reformas de Raúl Castro y poner al PCC por encima de la FAR, lo cual no entusiasma al pueblo, ni al gobierno cubano.
Los cubanos más demócratas y cercanos al centro polÃtico andamos por el Internet con más ideales que recursos, esperando por un poco de civilización y cultura que abra los ojos de la nación a los problemas de verdad importantes para Cuba. Damos mayor importancia a la educación que a las viejas palancas de equilibrio burgués. José Martà andarÃa con nosotros, sin aliarse al alto clero, sin confiar tanto en los marxistas, ni en los capitalistas, pensando en UN SOLO PARTIDO , porque de nada vale el discurso nacionalista sin unidad…no quiero hablar de enemigos, porque la mayorÃa de las veces es inventado, es retórica para cerrar filas. Martà sobre todo pondrÃa interés en la cultura, porque cada vez más los cubanos pretenden ser libres sin ser cultos ¿será que alguien por allà quiere privatizar la educación en Cuba, y sobran “Los demasiados“? Bueno ya es hora de promover buenas costumbres y nueva moral, y no me puedo imaginar eso sin cultura.
Hogar nacional donde quepamos todos, ¡que cosa tan linda! ¿El obstáculo? LA BARBARIE. La nación cubana atraviesa una crisis moral, si, del latÃn moralis, palabra vieja y respetable que necesitan todos los pueblos que aspiren a ser felices. Me dicen que la radio y TV en la isla transmite obscenidad (medios públicos), que los jóvenes no tienen hábitos de lectura, pero que todavÃa se respeta a los ancianos, bueno… quizás estamos a tiempo. Facebook por su parte esta embruteciendo y enajenando a muchos. Los sitios de odio (al gobierno de los socialistas en Cuba) hacen listas de “cubanos culpables”en la isla en sus páginas web, incitando a que se les ataque, se les golpee o se les mate, por sus ideas. MuchÃsimos andan diciendo LIBERTAD, sin saber la enorme responsabilidad de un ciudadano en una república. La subversión y la propaganda más bruta se convierte en algo respetable en redes sociales que al igual que las drogas, son paraÃsos artificiales para desahogar lo más bajo y mediocre del ser humano, y que NUNCA podrán sustituir las verdaderas redes sociales de vecinos y parientes. Todo indica que la chusmeria se hace dogma, y el libre pensamiento está muriendo. Mediocres intelectuales formados en las universidades de la revolución (y ahora exiliados), tratan de vender sus talentos sin éxito en el mercado francés o norteamericano, y arremeten contra todo cubano patriota desde su cosmopolismo, burlandose del nacionalismo para ocultar su alma traidora y anexionista.
El nacionalismo es natural, y no necesita retórica. Lo propongo cuando pienso en la tierra donde nacÃ, porque no hay nada más legÃtimo que el amor patrio.