Fijense en esta foto tomada por mi hermano en la calle 7 del north west en Miami. Una mujer de la raza negra sufre del acoso de la policÃa de Miami, simplemente por estar sentada demasiado tiempo en una parada. Aparentemente los dueños de negocios cercanos llamaron a la policÃa para sacar del area a esa persona, que no habÃa realizado ningún disturbio publico, pues ni siquiera puede haberse acostado en el banco, que esta diseñado para impedir que los desamparados lo usen para descansar (los guantes del policÃa es para evitar infecciones en caso de usar violencia y entrar en contacto con la sangre de la vÃctima)
En los años 90 muchÃsimos desamparados vivÃan bajo los puentes en el condado Dade, pero las autoridades del condado ordenaron modificar dichos puentes para que fuera imposible dormir de forma horizontal en el suelo debajo de ellos. Recientemente también ha comenzado una batalla legal para expulsarles de toda la zona del Down Town, con la escusa de que ensucian el area de rascacielos y entidades bancarias.
En la cultura del dinero, no ser solvente es casi un delito, y de hecho a los que se retrasan en pagar deudas se les califica de delincuentes, de manera que el sistema rechaza la imagen pública de pobreza y descarga sobre los mendigos toda su furia, en vez de crear estructuras sociales que alivien la vida de los desposeÃdos. Es verdad que existen instituciones que ayudan a las familias pobres con bonos de alimentos, pero para recibir estas ayudas se requiere tener una dirección fÃsica, lo cual es absurdo requerimiento para los que viven en las calles (homeless).
Los mendigos duran poco, la pobreza extrema mata a estos ciudadanos en medio de una opulencia escandalosa, y jóvenes de sentimientos nazis andan en las noches buscando mendigos que golpear y humillar. Muchos miran hacia otro lado, quizás por vergüenza o por no perturbar su visión de la sociedad en que viven. No hay prójimo que amar en un mundo competitivo, donde “si fracasas debe ser por tu culpa”. ¡Este es el capitalismo señoras y señores!, pero no crean que es natural, y que terminamos en esto por el ejercicio de la libertad, ¡TODO LO CONTRARIO! No existe sistema mas artificial que el capitalismo actual, ni modelo donde el estado intervenga más, lo que sucede es que tiene un refinado camuflaje, y tal parece que no esta dirigido sino por las vÃctimas.