Tengo algo terrible y oscuro que confesar. Preparense, pues para algunos he obrado muy mal y debo profundamente arrepentirme, o ser legalmente castigada. Si, lo gritaré a voz de cuello, para que todos lo sepan. ¡Es ahora o nunca!. Admito mi pecado…SI…he llevado remesas a Cuba. He sido una de esas que dias antes del vuelo maquiavélicamente traza estrategias para mejor cargar mercancías sin pagar sobre peso. !Oh la vergüenza! Esta Yadira que conocen se ha llenado los bolsillos hasta no dar mas, enganchado todo encima que pueda colgar ( cintos, collares, abrigos, etc ) y hasta he montado el avión con 6 blusas a la vez. He sido cojida en el delito a plena luz del día y con coraje asumo las consecuencias.
En serio, ¿ Por que he viajado con tanta incomodidad ? Para llevar en mi persona todo lo que usare en mi estancia y asi no ocupar espacio en mis maletines y asi transportar cosas para mis familiares. Yo nunca he ido a re-vender nada para hacer negocios y siempre me he pagado mi ticket.
Llevo todo lo que puedo a mis seres queridos en Cuba, y no me arrepiento de ser útil y aliviar en algo los problemas de mi gente en la tierra que me vio nacer. Junto a mi son muchísimos los cubanos en Miami que a pesar del bloqueo a los cubanos, y de las campañas de propaganda para que castiguemos a nuestros hermanos en la ísla ayudamos en lo que podemos.
En los ultimos tiempos hemos visto disidentes salir y entrar a Cuba cargados de mercancias y dinero aprovechando las reformas en la ísla, y el clima de tolerancia política hacia su actividad subversiva (y nada legal), pero ese dinero no es para la sociedad civil, ni para el gobierno, sino el pago por lo que hacen esos disidentes contra Cuba. Es MUY curioso como nadie ve mal eso dentro de las filas de la derecha en Miami. En cambio cuando un cubano normal lleva o envia ayuda a su familia, es inmediatamente visto de manera negativa por esa misma derecha que apoya y ayuda a financiar la subversión en Cuba ¿doble moral?
Uno de los más grandes fracasos de la política de empobrecer a los Cubanos dentro de Cuba, es la enorme cantidad de ayuda que envían los emigrados, lo cual es señal de que la mayoría de nosotros no se traga el paquete de propaganda negra que fabrican la ultraderecha y algunos políticos degenerados que se ocupan del caso cubano. No es que seamos un ejercito de comunistas enviando ayuda al Estado cubano, sino que seguimos siendo : cubanos con deseos de no convertirnos en malas personas.
El pasado jueves un periódico de nuestra ciudad, publico un articulo bastante manipulador que presenta esa ayuda de forma torcida como una prueba de que Cuba depende de Miami, y algunas cuantas mentiras de adorno, siempre mencionando en pomposo nombre (en ingles por supuesto) al “The Havana Consulting Group”. La verdad que el grupo no me impresiona, porque ya vi a su director Emilio Morales, en el programa de Oscar Haza (enero del 2011) riendose de una hipotética mujer con licencia para vender hierbas en Cuba (de la que hablo Haza), y despues de su risa burlona dijo: me imagino que sea para alimentar el ganado…La verdad que toda esta gente que con aires de superioridad que se burlan de los trabajos y necesidades de humildes cubanos en la isla, no merecen respeto, y yo no estoy dispuesta a creer en sus números.
Se muy bien que Cuba obtiene grandes ingresos por sus misiones médicas en estados amigos, y por el turismo. Para mi es una mentira que si Miami no ayuda el país se hunde, pero aún si eso fuese verdad (que no lo es) me da gracia como un hecho tan indicador de la desobediencia civil en Miami hacia la propaganda batistiana y anexionista, no las presentan totalmente distorsionada para sacar ventajas políticas donde no las hay. ¿Si el motor más potente de la economía cubana” (como dice la firma The Havana Consulting Group) somos los que en Miami no le hacemos caso a la propaganda en contra de esa ayuda, como se atreven a tanta manipulación?. Evidentemente los cubanos en Miami queremos ayudar a los nuestros, y eso por encima del bloqueo y el odio de los intransigentes.
NOTA: Cogida en accion en el aeropuerto Ignacio Agramonte de Camaguey, Cuba.