Cuando entreviste a Canovas en Camagüey supe bastante del comportamiento de los disidentes en la provincia. El formaba parte del CID en Camagüey, y me dijo con pocas palabras como los grupos se organizan en busquedad de dinero fácil y visas de emigrante. El me contó que un campañero suyo apodado como Achi y miembro también del CID en Camagüey acababa de salir de prisión por dedicarse a destruir bustos de José Martà por toda la ciudad, y me pareció que mas allá de los problemas de alcoholismo y de marginalidad, la disidencia tiene un serio problema de formación polÃtica que no le permite distinguir por separado, el gobierno, el estado y la nación cubana.
Según Canovas durante años la Sección de Intereses de los Estados Unidos no solo le negó a el una visa como refugiado teniendo en su poder una carta de libertad relacionada a una antigua causa por contrarrevolución en los 80, sino que en esas oficinas sufrió chantaje para que militara en grupos de disidentes bien vistos por el cónsul norteamericano, y de esa manera a su debido tiempo recibir la deseada visa de emigrante.
Canovas me dijo que se sintió manipulado por la SINA, en su deseo por salir del paÃs, pues le ofrecieron como precio del pasaje, desarrollar una actividad polÃtica a la cual no sentÃa la menor inclinación. Los grupos predilectos del cónsul anterior (No el cónsul actual Timothy Roche) eran al parecer los más favorecidos con visas y con gestos legitimadores del SINA, que propiciaban que algo del dinero del usaid llegara a los disidentes.
En esta foto Canovas aparece en una reunión del CID en Camagüey. Canovas y otros disidentes en Camagüey fueron atraÃdos también por pagos regulares que estos grupos ofrecen a quienes desean formar parte de sus actividades, pero según me contó, ya estaba desengañado del grupo, porque sus jefes se quedaban con el dinero que venia del exterior y les daban solo migajas, además de un trozo de pastel y algún refresco en sus reuniones.
Nota: El objetivo principal de muchos miembros de estas organizaciones ilegales es obtener finalmente una visa como refugiados polÃticos, pero esa visa depende de la voluntad de quienes les dirigen, y hay mucha corrupción en este proceso.
