Vine a los Estados Unidos en julio de 1994 con mi familia, comenzaba el éxodo de balseros, y aunque era chica, recuerdo las imágenes por televisión. Era impresionante y triste , de manera que siempre he sido sensible a cualquier intento por disminuir la dignidad de ese grupo de cubanos que hizo lo que creyó necesario según las circunstancias del momento. Me ha indignado la forma discriminatoria en que Martà Noticias asocia la reputación de ese grupo de cubanos con el asesino de Jimmy Ryce, aquel niño de mirada dulce que sufrió tan horrible muerte.
Con la ejecución ayer de Juan Carlos Chavez, Martà Noticias recordó a todo el mundo que el asesino era un balsero, y eso es tan dañino para la reputación de todos los balseros que solo me lo explico como propaganda contra nuestro orgullo nacional, es decir como parte del proyecto de destrucción de nuestra reputación nacional.