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Zunzuneo, Piramideo, Conmotion es básicamente lo mismo; creación de redes sociales no naturales dentro de Cuba para estimular la ruptura social, el conflicto con la autoridad. Si es posible pues tambien el derrumbe del estado a través del caos y la rebelión “cívica”. Algunos de estos proyectos subversivos son secretos, otros son “discretos”, y no faltan los que son anunciados abiertamente y sin ninguna vergüenza por TV-Martí, como es el caso de Piramideo.
Los disidentes cubanos estan estrechamente vinculados a proyectos que se apoyan en las nuevas tecnologías. Ellos son parte del proyecto general que busca la formación de comunidades virtuales conectadas a centros de propaganda y agitación política. También estos proyectos destinan recursos a la promoción de “lideres” que puedan guiar a la masa critica hacia una desobediencia civil bajo control, para impedir tendencias nacionalistas. Si una “revolución de colores” ocurriera, ellos favorecerian la colocación de títeres políticos obedientes a la influencia exterior.
Los disidentes cubanos, mas allá de una retórica basada en derechos civiles, repiten un discurso emancipatorio muy subjetivo y lleno de contradicciones que refleja el deseo de coincidir con la propaganda que se crea en el exterior sin tener en cuenta la realidad cubana. En su contacto con apoyadores fuera de Cuba, pudieran estos disidentes exagerar su papel dentro de la sociedad civil cubana para no ser sustituidos por otras opciones. Ellos mienten diariamente para hacerse necesarios, y también puede ser que hayan manipulado tanto que embarcan y destinan al fracaso las políticas del USAID con relación a Cuba.
Zunzuneo ha sido un golpe terrible para el USAID, y su imagen en el mundo. ¿Que pais podrá confiar en futuros proyectos del USAID ? Ya se han hecho intentos por disminuir los efectos destructivos de este escandalo que reflejan los periodicos más importantes en los Estados Unidos, pero será imposible salvar la reputación perdida de los disidentes vinculados al mismo.
La bloguera Yoani Sánchez es mencionada en los documentos obtenidos por Associated Press, que la muestran como una de las personalidades que según los organizadores “se beneficiaria de la plataforma de mensajería de ZunZuneo”.
Ella lleva un tiempo anunciando una revista digital, y lo normal es que nos preguntemos si esta publicación es parte de la guerra secreta contra Cuba. A la extrema derecha en Miami no le importa mucho los medios para llegar al deseado fin del regimen cubano, pero ya muchos ciudadanos norteamericanos se preguntan si vale la pena perjudicar la imagen moral de los Estados Unidos con estos proyectos secretos que violan tantas leyes en Cuba y en los Estados Unidos.
El fracaso del Zunzuneo no debe ser el único fallo de una política secretista basada en los informes de los disidentes cubanos y en la persistente obsesión de querer cambiar el futuro de Cuba con trucos subversivos. Ninguno de los planes subversivos se apoya en las estructuras electorales dentro de la ísla como vía de que tengan éxito sus disidentes favoritos. Ellos deben sospechar que ningún disidente seria elegido en las asambleas vecinales. O sea, se sabe que no son populares.
Para terminar en una nota mas bonita, les cuento que en mi última visita a Cuba tuve la maravillosa experiencia de ver un Zun Zún ¡POR PRIMERA VEZ! Era una mañanita media gris y abrí la ventana para ver como era un amanecer Habanero. Entre las flores de un jardín vi algo que parecía un insecto gordo cubierto de escamas esmeraldas. Ni intente grabarlo, quede hechizada y boqui abierta con aquel pajirito que parecía un muñequito o algo ficticio de alguna imaginación mágica.
Que mal gusto usar esa frágil avecilla como símbolo de un proyecto secreto que solo buscaba “problema entre cubanos”. ¿Acaso no es preciosa la vida humana?… ¡Cuanto la desprecian quienes conspiran en secreto sin tener en cuenta la sangre inocente!