 Cuba vive desde tiempos de la guerra frÃa prácticamente en un estado de excepción. Sanciones económicas de todo tipo, guerra psicológica con frentes de propaganda audio visual y proyectos que promueven el éxodo de los profesionales han acostumbrado a los cubanos de ambas orillas (Cuba-U.S.A) a unas discusiones que no favorecen el orgullo nacional.
Una de las obsesiones de Miami en medio de esta guerra psicológica ha sido el tema de la prostitución. Como si fuese Cuba un antro de perdición tal y como lo refleja la propaganda anti cubana, la idea se propaga ya en los estados de opinión. Quizás algún derechista ingenuo señale que todo esto es para denunciar que en Cuba el nuevo hombre fue un fracaso, y que de nada sirvio aquel inicial impulso de la joven Revolución por erradicar los “vicios del capitalismo”, pero yo creo que la cosa va mucho más allá, y daña la reputación no del régimen polÃtico cubano, sino de la nación cubana en su totalidad.
Hace dos dÃas un conocido músico cubano dijo (vÃa telefónica) en un programa de televisión de Miami que los cubanos en la Ãsla, eran un pueblo de mendigos y prostitutas. Esto es un reflejo del enorme y constante esfuerzo propagandÃstico que sufre la nación cubana para minar las bases de su orgullo nacional. No es la primera vez que precisamente sean cubanos quienes repiten ideas prejuiciadas contra su propia gente, y esto no solo no es normal, sino una trágica consecuencia de toda está propaganda antinacional.
En primer lugar recordemos que todo comienza en estos canales de comunicación social con base en Miami. Se supone que el objetivo principal de estos medios sea informar a la comunidad de las preocupaciones locales. Entendiendo que la prostitución en Miami genera cada año más dinero que el tráfico de drogas y armas, es crucial que no se hable tanto del problema en Cuba, teniendo tan grave crisis en nuestras calles.
¿Por qué entonces , se tarda un informe realizado por una organización no gubernamental (The Urban Institute) , para arrojar algo de luz en este problema social tan serio ? Exagerar el problema de la prostitución en Cuba, pudiera desviar la atención hacia fuera y descuidar por ejemplo la prostitución infantil local. El Urban Institute descubrió en el 2003 , que el proxeneta de a pie “pimp” gana alrededor de $ 21.929 a $ 17.741 por semana en el sur de la Florida, y solo un ejercito de prostitutas puede muever esta economÃa libre de impuestos. Sin que se refleje demasiado en los medios, ni siquiera en el Internet, la prostitución sigue creciendo en Miami mientras la TV local muestra vÃdeos donde caminan jovenes habaneras por el malecón. Cuando usted escribe por ejemplo en Google ” la prostitución en Miami “, en español , las dos primeras sugerencias de este motor de búsqueda son Venezuela y Cuba . Una vez que los medios de comunicación tienen un flechazo obsesionado con una región , no hay forma de limpiar las mentes.
Es el plan B, fácil tema que se explota cuando hay un dÃa flojo en las noticias. Un canal privado de televisión en Miami necesita primeramente dinero, sin dinero deja de existir, y sobre esta primera necesidad monta su programación que debe atraer al empresariado privado con la idea de promocionar sus mercancÃas o servicios. El problema es que gran parte de ese empresariado tiene una visión algo aburguesada del mundo, e inevitablemente todo este mundo se inclina a la derecha polÃtica. Para colmo de males muchos empresarios locales son emigrantes cubanos, venezolanos afectados de alguna manera por el pensamiento de izquierda y la revolución social en sus paÃses de origen.
Sólo un escaso 13 % de la población estadounidense está de acuerdo o apoya las acciones del Congreso. Daniel McAdams del Instituto Paul Ron nos dice que la gran mayorÃa de los congresistas sólo se preocupan por los temas populares, pero en los Estados Unidos es importante averiguar quien hace popular un tema y quien esta detrás de las matrices de opinión.
¿Quién decide lo que se convierte en la corriente principal ? ¿Qué o quién dicta las leyes no escritas a las que los medios de comunicación deben adherirse sin dudas ?
Fuentes de noticias no naturales , como el financiamiento federal de Radio y TV Martà , que ha costado más de $ 500 millones desde su creación. Son en Miami quienes deciden las matrices de opinión. No es legal que emisoras creadas con objetivos de guerra psicológica transmitan dentro del territorio nacional (U.S.A), pero lo están haciendo, y están tocando el tema de la prostitución constantemente. La matriz de opinión tiene un objetivo: destruir la reputación moral de la nación.
Desde la década de los 90 la caÃda del bloque económico y polÃtico del mundo socialista afectó el nivel de vida material de los cubanos. Cuba para sobrevivir como paÃs se abrió al turismo al mismo tiempo que muchos cubanos emigraban ,y no es raro que en tales circunstancias se produzca una decadencia moral en grupos vulnerables en la isla. La prostitución se hizo presente, pero de ninguna manera es menor que los paÃses del área, solo que hay un interes polÃtico en colocar una lupa gigante sobre Cuba.
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