¿Será que la CIA es tan eficiente que sea yo agente de “La Agencia” sin saberlo? Claro que hablo en broma, pues en estos tiempos todo se subcontrata, y en todo caso serÃa yo sospechosa de servir al Usaid. Llevo rato perdiendo “amigos” dentro del bando “revolucionario”, mas bien en las filas de esos que creen poseer el copyright del marxismo. Yo nunca dije ser comunista, pues nada más lejos de la verdad, pero al enfrentarme a la extrema derecha en Miami, mucha gente asumió que yo me inclinaba incondicionalmente hacia el gobierno cubano, y por lo tanto es posible que algunos se hayan equivocado conmigo viendo cosas que no son. Una persona que reconozco como de la “derecha decente en Miami” un exiliado de los viejos, me dijo al verme aparecer en la televisión local: Yadira ten cuidado con esos productores del ICAIC que son segurosos y te están haciendo una emboscada. Como yo no soy tan paranoica acepte las invitaciones a esos programitas privados, y me enfrenté a esos “crÃticos de arte” recién llegados de la Habana que tanto se afanaban en hacerme parecer como “defensora del régimen”. No me gustan las intrigas, y digo al pan pan, aunque no le guste a algunos de allá o de acá, pero eso no es suficiente cuando te hacen una trampa mediática para hacerte quedar mal en tu comunidad. Sospecho que soy algo de izquierda, porque me interesa mucho la suerte del pueblo cubano, no de sus élites, y como ese pueblo no es rico, entonces cobra sentido para mi eso de: Con los pobres de la tierra quiero yo mi suerte echar…Creo que Martà era de izquierdas, y revolucionario, por eso me identifico plenamente con su nacionalismo, pero siempre con plena conciencia de que vivo en el siglo XXI y muchas cosas deben ser superadas para progresar. ¿Me perdonaran en Cuba que no sea de la ultraderecha?
Hace unos dÃas anda una carta rodando de blog en blog, incluso fue publicada en “14 y medio”, titulada”Recado para Yadira”. Lo gracioso de todo esto, es que una critica a mi ideologÃa sea publicada en diversos espacios donde yo nunca he existido. La mujer que escribió la carta es una ex-miembro de la Dirección de Contrainteligencia del Ministerio del Interior entre 1972 y 1989 (según ella misma dice) se dirige a mi persona de forma torcida, y empieza con una mentira; de que quisiera conversar conmigo… Esta mujer hace rato me solicitó amistad en Facebook y nunca me ha dirigido la palabra, pudiendo hacerlo cómodamente. Aunque sea un “hi” debió decirme antes de lanzarse a este tipo de campañita que trata de descalificar, tergiversar y crear un estado de opinión sin base seria. Viendo que no quiso darme el “recado” de forma directa y honesta, queda evidente que es tan solo un publicity stunt.
Sinceramente, no voy a entrar en esos juegos, bretes o “batallas de ideas”. Si esta señora fue del Ministerio del Interior, mientras agentes de su mismo Ministerio secuestraron a mi papá (en 1986) y le aseguraron durante meses de cautiverio que le fusilarÃan por un supuesto plan terrorista de asaltar un canal de TV local…esta mujer no tiene credibilidad alguna para atacar mi nacionalismo. Quien fue agente del la contra inteligencia cubana en el MININT en esos dÃas, no tiene moral ahora para reclamarme nada desde una supuesta posición de contrarevolucionaria.
No creo que el gobierno cubano necesite inventarse un enemigo exterior para justificar su existencia, porque ese enemigo realmente existe, e insiste en destruir todo el estado cubano. Sin embargo, si creo en la pereza mental que enferma las inteligencias y las sume en un letargo como siesta de mediodÃa que balbucea nombres y conjuras de forma irresponsable, según convenga al interés del momento.
Ahora me acusan “los revolucionarios”de ser loba disfrazada de cordero, que me hago pasar por humanista revolucionaria para infiltrar el corazón de la Revolución en Cuba. Que manipulo, que embarro la pÃldora del veneno con chocolate y extractos de semi-izquierdismos, y una vez colada los devorare sin misericordia para abrirle paso al fantasma de Milton Friedman. Incluso, algunos han llegado a decir que mi tiempo como periodista en el periódico digital, Progreso Semanal, fue una maniobra más por seducir y engañar desde posiciones de un progresismo constructivo. El orden de los factores es decisivo, es como si a un cineasta en Miami se le invitara a rodar su film en el festival de “Cine Pobre” en Gibara, y luego alguien le acusara de querer subvertir la juventud en nombre del usaid. Una vez fui invitada a exponer óleos en Camagüey, y el proyecto fracasó porque el Tesoro norteamericano no me dio el permiso, pero ¿Se imaginan si luego me hubiesen acusado de querer subvertir a los jóvenes de mi provincial natal con una conspiración artÃstica?
Por supuesto que existen maniobras reales “discretas”para operar y destruir el estado cubano. He denunciado siempre todo intento subversivo, porque lo considero inmoral y artificial. Los pueblos deben decidir su destino polÃtico por si mismos, pero una cosa es el Usaid y otra muy distinta es la sociedad civil cubana que vive fuera y dentro de la isla. La reconciliación entre cubanos es el único camino de paz posible para progresar en los serios retos que nos esperan como nación. El desarrollo exponencial de las tecnologÃas gracias a la cooperación cientÃfica y al Internet, nos llevara muy pronto a hallazgos cientÃficos que de forma acelerada cambiaran radicalmente todos los sistemas sociales. Sin lugar a dudas la Unión Europea dejara de ser lo que es, y un nuevo orden internacional que ahora nadie imagina va a crear un grado de perplejidad ideológica en los pueblos que aprovechara la ultraderecha en todo el mundo. Concentración de capitales y herramientas tecnológicas de increÃble aplicación serán el arma perfecta de una élite que no tiene interés en compartir los beneficios de tales avances. Creo que la Revolución cubana y todo lo que ha significado para la izquierda mundial puede dejar de existir sino se adapta a ese nuevo mundo que ya no puede ser interpretado según lo que vio Carlos Marx hace tanto tiempo, ni tampoco según los apologistas del capitalismo clásico.
Oh se me olvidaba contarles que antes de ser un agente del imperialismo para algunos, ya habÃa sido una agente comunista infiltrada para otros y esta foto donde aparezco vestida con el uniforme de mi abuelito paterno en mi primer viaje a Cuba fue la fuente de inspiración para una teorÃa conspirativa bastante infantil, pero propia del Miami derechista. Me imagino que cada cual ve lo que quiere ver, y no faltara quien diga que soy doble agente ( aunque la “compañÃa” siempre ha pensado que es riesgoso ese juego), pero finalmente el sentido común reinara, y volveré a ser Yadira Escobar, una joven exiliada con sentimientos nacionalistas hacia su tierra natal que cree que los mejores dÃas están por venir.