NOTA: Aunque está foto con mi abuelo enfermo antes de morir en Cuba tiene ya 12 años de vieja, es la favorita de mis oponentes en la campaña electoral por el congreso en el distrito 25. Fue durante mi primera visita a Cuba tras 15 años de exilio polÃtico que pude abrazar a mi abuelito debilitado por su enfermedad terminal. Como soy una persona religiosa, que mi abuelo me diera su ultima bendición fue muy importante para mi y aunque algunos extraños descarguen su odio, volverÃa a posar junto a el para hacerlo feliz por un breve momento. Hice un articulo sobre su pasado como combatiente pero hoy quienes perpetúan la guerra frÃa lo sacan fuera de contexto de forma maliciosa. Él fue un luchador clandestino en Camagüey y arriesgó su vida por la democracia y la constitución del 40, pero nada de eso será dicho en medio de una propaganda financiada por gente que solo quiere mantenerse en el poder.
Fue en la Sierra de Cubitas, al norte de Camagüey en el 2008. Regresaba a Cuba por primera vez, ya adulta y respete profundamente todo lo que mi abuelo representaba, su lucha y su generación. El tiempo pasó, mi abuelito ya falleció y ahora Cuba tiene relaciones diplomáticas con los Estados Unidos.
Siempre estuve a favor de la normalización, incluso cuando era más de derechas, y por eso me llovió la enemistad, traición y agresión. Pedir la Reconciliacion en el pasado me trajo muchas discusiones en la Televisión de Miami cuando otros cubanos desde la extrema derecha me acusaban de ser una castrista más, sin escuchar mis puntos de vista. Miami es una ciudad complicada en eso de la libertad de expresión.
 Me hubiera gustado mucho estar entre los 700 invitados a la apertura de la embajada cubana en Washington, pero no fui invitada. Cosas de la vida. Soy desde luego la hija de un ex-preso polÃtico, y entiendo que pertenezco más al exilio. Es una complicada relación.
Mi abuelito conservó los sÃmbolos del movimiento del cual fue miembro, aunque su entorno cada vez más se alejó del proyecto inicial. Los esbirros de Batista le torturaron cuando el se enfrentó a la dictadura y casi le matan por ser un miembro clandestino del movimiento 26 de julio, en la lucha urbana. Como los señores que vivieron esa época me han explicado, la lucha urbana era mucho más peligrosa que la del monte; la de la sierra.
Cientos de jóvenes arriesgaron sus vidas por una Revolución para los pobres y no sólo para quitar a un dictador militar. Esos combatientes, estén en Cuba o en Miami y yo les admiro por ponerse del lado de los humildes.
Hoy en dÃa cuando los burócratas del aparato estatal cubano se envejecen, se mudan a los Estados Unidos para pasarse a las filas de una contrarrevolución trasnochada. Mientras se desahogan en las redes sociales me pongo a pensar en las vueltas que da la vida para los materialistas sin escrúpulos. En cualquier rincón habanero hay banderas británicas o norteamericanas ondeando; son una mala señal para cualquiera con un poco de sentido común. No me preocupa porque sea un reto más para el sistema cubano, sino porque son una expresión del desaliento hacia lo propio y la esperanza a lo extranjero.
La tierra de Cuba es fértil y no se entiende que la población no pueda tener viandas a precios más comprables. Los cuenta-propistas no pueden seguir dependiendo de productos comprados en tiendas minoristas. Como iniciativa privada necesitan de almacenes y de compras al por mayor para no ir a la quiebra. De lo contrario, todos terminaran ofreciendo servicios y productos sólo para turistas y los cubanos que viven de remesas, ya que los precios altos quedan fuera del alcance de la población normal.
El 2016 será un año difÃcil. Las sanciones económicas contra Cuba continúan. La ley de ajuste cubano enajena los ánimos y empuja a muchos jóvenes a la aventura de hacer proyectos lejos de la Patria. Cuba pierde poco a poco el apoyo de Venezuela y la derecha venezolana se lanza contra las relaciones entre ambas naciones sembrando chovinismo y cultivando el caos. Argentina en manos de la derecha conspira contra la integración y Cuba con una embajada norteamericana tendrá nuevos retos ideológicos. Si llegara el final para el colectivismo marxista como formula económica, todavÃa quedara la nación y seguirá teniendo sentido el patriotismo que ayuda tanto a la soberanÃa polÃtica.
Ha llovido muchos desde el ’59, pero todavÃa quedan algunas conquistas del pueblo bastante institucionalizadas, escritas en papeles y tenidas como algo tan natural como la lluvia que cayó todos estos años.
Estos sÃmbolos (que les muestro en la foto) de una lucha popular nacionalista mañana puede que estén en un museo apático, o quizás se transformen con una nueva ola de emoción y patriotismo que levante ánimos caÃdos. El futuro lo decidirán los jóvenes de hoy, y eso lo saben los poderosos. Opulentos buitres revolotean ya sobre los vulnerables, pero Dios no será favorable a sus mezquinos planes.
Mi abuelo fue un héroe, y me dejó una herencia secreta que llevaré conmigo por el resto de mi vida. Es algo que ninguna aduana pudo confiscar ni los micrófonos detectar. Se los contarÃa pero…ya no serÃa un secreto. Es una orden casi divina, casi obligatoria y aunque no muy fácil, será grato cumplirlo.
Fuerza amigos, que los mejores dÃas están por llegar.
Feliz 2016 😎
NOTA: En 1986 mi padre fue acusado por el Ministerio del Interior en Cuba de ser jefe de un grupo clandestino anticomunista (Grupo Caimán/causa 8/86). Vino al exilio bajo el programa del SINA de ex-presos polÃtico en 1994 y en el 2008 crea a Grupo caimán como una organización no lucrativa que busca la normalización de relaciones entre Estados Unidos y Cuba fundamentalmente, pero que también lucha por los derechos humanos y por relaciones diplomáticas entre Israel y Cuba.
 VÃdeo-spot donde digo algo sobre la lucha de Grupo Caimán en la Cuba de los 80.