Me preocupa seriamente la suerte de miles de cubanos que están ahora mísmo en varios países latinoamericanos tratando de llegar a los Estados Unidos. Bueno, supongo que el Senador Marco Rubio y su clase política deben estar satisfechos ahora que Obama ha eliminado la ley de “Pies Secos Pies Mojados”. El gobierno cubano igualmente debe estar satisfecho, aunque por razones totalmente diferentes. La derecha cubano-americana lleva mucho tiempo sufriendo con la llegada de emigrantes económicos de la isla, pues son un voto demócrata que no se suma al odio anti-castrista del exilio tradicional. Cuba por su parte agradece un paso hacia la normalización real y hacia un orden migratorio que no ponga en peligro las misiones médicas en el extranjero ni fomente el contrabando humano.
Dejar el socialismo y sus gratuidades no es tan malo si al llegar a Estados Unidos el Medicaid te ofrece servicios de salud y los cubanos hace rato que conocen sobre el tratamiento especial que se les ofrece gracias a que unos barbudos hace muchos años hicieron junto al pueblo una Revolución socialista-nacionalista y la política norteamericana fue apoyar a todo el que “escapara” de Cuba.
Anoche el Congreso quedó hasta tarde comiendo pizzas y refrescos para comenzar oficialmente a “derogar y reemplazar” el famoso pero ya muy odiado Obamacare. La medicina es un negocio lucrativo, una dura carga a la economía que la próxima administración necesita ajustar a la visión republicana. Trump también ha dicho que revisara políticas con relación a Cuba, sin embargo, supongo que Trump, habiendo ganado las elecciones en parte por ser el único candidato de corte nacionalista que ofrece un freno a la inmigración descontrolada, no cambiará esta decisión de Obama de última hora. Honestamente, no me parece profesional dejar todas estas políticas tan serias para los últimos días de su mandato. Demasiado golf, tal vez.
Habrá confusión ahora con esta decisión. ¿Saben por qué en este asunto de inmigración Obama coincide con Trump? Porque como les he dicho, Obama opera con una doble moral con los emigrantes. Un caramelo junto a una puñalada. Con Trump por lo menos se ve a una legua lo que ofrece pero lo mismo nunca será cierto de esta Falsa Izquierda globalista.
¿Cuál es el futuro de las remesas? Sin dudas, con este nuevo rumbo habrá un inevitable y gradual descenso de las remesas (que aunque ayudan a un sector son la causa de muchas desigualdades y encarecimientos en la isla). Cuba más que nunca necesita de urgencia que se eliminen las sanciones económicas para que pueda desarrollar un modelo económico más saludable.
El cubano de a pie no será feliz con esta noticia. Los de abajo sufren la peor parte del embargo económico contra Cuba. La ley que ha dejado de existir les daba una esperanza a pesar de las muertes en el mar y en las selvas de centro-América, pues les permitía escapar de la mala situación económica creada por las sanciones contra Cuba. Ayudas de todo tipo facilitadas de manera privilegiada a los cubanos, hicieron que muchos recién-llegados se sumaran con entusiasmo a la derecha…sin entender demasiado al capitalismo norteamericano.
Miami no puede sustituir a Cuba como territorio de una nación por muy malos que sean los tiempos. Ya es hora de que al pueblo cubano se le permita decidir su propio destino político, sin premios ni castigos. Tratémonos como adultos serios, de una vez y por siempre.
La verdad, ya va siendo hora en que los cubanos se concentren en su propio país porque el triste destino de una asimilación (casi siempre medio fallida) en tierras lejanas es el castigo de una diaspora que jamas debió ser idealizada. Lo sigo diciendo aunque se cansen de mi, el nacionalismo el la única solución. Ustedes deben saber que mi nacionalismo no es ese genérico que algunos han ido adoptando por moda del momento pero que les queda como un feo, cascaron vacío y extranjero a su pensamiento cosmopolita.
Nota: Los cubanos podrán seguir viniendo a los Estados Unidos en cantidad de 20 000 al año según lo acordado por ambos gobiernos.