Bandera cubana hecha a mano por mi hace unos años.
Hoy me enteré que el “opositor” cubano, Danilo Maldonado se expreso de manera especialmente hostil y vulgar sobre la bandera cubana y nuestro himno nacional. No pensé que el tema requería un post porque entiendo que este tipo de elemento antisocial que se siente atraído por la contrarrevolución en Cuba no merece un estatus político, sino policíaco o psicológico , pero algo debo decir teniendo en cuenta como los grandes medios maquillan a estos sujetos y confunden a personas honestas preocupadas por los derechos civiles en la isla.
Normalmente no hablaría despectivamente de nadie, pero en estos precisos momentos Cuba se encuentra en una posición muy delicada en su historia. No son momentos de charlatanería anexionista sino de fortalecimiento de la cultura cubana. Danilo Maldonado es un producto degenerado del ambiente subversivo construido por muchos años de propaganda anti-cubana. La guerra sistemática contra cualquier reserva de nacionalismo cubano ha salido cara al contribuyente norteamericano, pero ya está dando sus frutos en Cuba debido a la aplicación científica de métodos muy eficaces contra pueblos que atraviesan dificultades económicas. Danilo no es el primer cubano que descaradamente arremete contra su propia Patria. Conozco directamente a un joven alcohólico camagüeyano que en medio de una borrachera prolongada destruyo varios bustos públicos de José Martí mientras con grandes gritos acusaba a Martí de sus problemas existenciales.
No se debe subestimar el bombardeo de sugerencias que la subversión dirige a personas vulnerables para politizar sus crisis existenciales y si Maldonado es una persona enferma de los nervios, o simplemente padece un trastorno de la personalidad que le hace tener una muy baja auto-estima, no va a poder resistir la tentación de hacerle el juego a la injerencia extranjera que le eleva a la categoría de “perseguido político” sin mucho esfuerzo de su parte más allá de sus extravagancias y vandalismos en espacios públicos.
Ahora, si este sujeto, simplemente es un holgazán asalariado promovido para traicionar a su gente y burlarse de los símbolos más sagrados a los cubanos, entonces debemos tomarlo como ejemplo negativo y enseñarle a las nuevas generaciones como se comportan los indignos que por accidente nacieron en la tierra que amamos y que sirven vilmente a los extraños. El cubano que se exprese tan irreverente y falta de respeto con los símbolos de la Patria, en la practica y a nivel espiritual ya no es cubano, aunque conserve un pasaporte que le permita entrar y salir de mi Patria como si fuese un cubano más.