¿Sabia usted que Leopoldo López, una de las figuras más emblemáticas de la derecha Venezolana y su partido político, son de centro-izquierda? ¡Están hasta afiliados a la Internacional Socialista! ¿Lo sabia Marco Rubio cuando llevó la esposa social-demócrata de Leopoldo a la Casa Blanca para conocer a Trump? Eso es algo que los Republicanos de derecha no quieren dignarse a Googlear porque no desean desestabilizar su solución simplista a los problemas en Venezuela. Para ellos, todo mal social se soluciona con libre mercado.
He ahí un error fatal: pretenden descalificar a los manifestantes liberales que van contra Trump por ser una oposición no-patriota, violenta y relacionada con el globalista de George Soros. Políticamente, la oposición en EE.UU. es bastante similar a la Venezolana. Sin embargo, cuando las mismas fuerzas anti-nacionales, se lanzan contra el presidente Maduro, estamos frente a una justificada sublevación que ‘felizmente’ terminará en guerra civil. ¡Ay que double-standard! Esa doble moral revela pereza mental y el mal habito de concluir que todo enemigo de mi enemigo, es mi amigo.
Quien quiera ser nacionalista-populista en casa, debe al menos tolerar que sus vecinos soberanos sean tan populistas y patriotas como ellos. Eso es ser magnánimo. Eso es ser una gran nación segura de si misma…y de su libre mercado.
Pero el discurso contradictorio no va a cambiar y la derecha conservadora (al igual que los Republicanos del Establishment), seguirán atacando a un comunismo que no existe tal y como ellos creen en Venezuela, y pedirán en ingles por la liberación de Leopoldo López; un social-demócrata de la Internacional socialista. Estos personajes empecinados en desestabilizar y perjudicar su propio país por tal de llegar al poder solo están destruyendo su propia nación al darle la espalda al dialogo respetuoso. Nadie que promueva la violencia contra inocentes compatriotas con terrorismo urbano en este 2017, quedará bien parado en los libros de historia del mañana.
No creo que la derecha/izquierda-traidora de Venezuela esté satisfecha todavía con las palabras de Trump, a pesar de las sanciones económicas contra el poder judicial de Venezuela. Desde los días en que Chavez se sublevó contra un gobernante social-democráta (Carlos Andres Perez), la Falsa Izquierda sabe muy bien como engañar a los venezolanos con opositores “pacíficos, centristas e izquierdistas”. Ellos dejan el trabajo sucio del terrorismo callejero para los desclasados más marginados y vulnerables a la propaganda de agitación que se organiza desde los más oscuros rincones del Internet.
Ahora en Miami ocurren “actos de repudio”, protagonizados por extremistas venezolanos contra Maduro, que reproducen el odio y la intolerancia que ya ha sufrido Miami desde hace medio siglo entre cubanos. Por supuesto que no habrá un consejo de paz por parte de estos anti-castristas para los más recientes exiliados venezolanos, y mucho menos cuando crece la fantasía de que si Venezuela se hunde, Cuba también. Esta tóxica alianza entre cubanos y venezolanos anti-comunistas en Miami hace ya lucir esta ciudad como una pesadilla tercermundista de derechas, donde ni remotamente predomina la cultura de tolerancia que tanto nos pretenden enseñar.
Es que desde luego, ¿como van aprender estos rabiosos cubanos-venezolanos de Miami a ser tolerantes si Washington continua imponiendo sanciones caprichosas a magistrados en Venezuela?
Acto de repudio entre venezolanos en una panadería en la ciudad del Doral (Condado Dade).
La violencia política y el fracaso de la mediación del Papa Francisco en ese conflicto son bien recibidos por aquellos cubanos que desde Estados Unidos imaginan ya como muy probable un cambio de régimen en Cuba como producto de la combinación de tres grandes condiciones:
1-El arribo de un nuevo jefe de Estado en Cuba en el 2018.
2-El enojo de un sector social que al no poder emigrar a los Estados Unidos canalice sus frustraciones en contra del gobierno de la isla. Fenómeno titulado ‘olla de presión’.
3-La destrucción del estado venezolano por una revolución de colores al estilo Gene Sharp.
Los cubano/venezolanos no solo son intolerantes al pensamiento ajeno (¿desde cuando es un pecado ser comunista abiertamente?). Sus contradicciones internas han convocado una marcha para este sábado 20 de mayo, pero aún en esa convocatoria ya hubo divisiones y peleas que reflejan su eterna división. Les persigue una profunda incapacidad por resolver (pacíficamente) conflictos de tipo nacional y siempre apelan a la intervención de los Estados Unidos en los asuntos de Cuba/Venezuela.
La propaganda irresponsable que desde los Estados Unidos en Twitter orienta ataques despiadados contra las autoridades en Caracas, afirma que esto es una guerra contra los cubanos que la Habana envía a reprimir “marchas pacificas”. ¡Si ta bien! Los anti-castristas reproducen estas locuras en las redes sociales hasta el cansancio, sin tener en cuenta que fomentan el odio a los cubanos.
¿Porque Twitter no levanta un dedo para remover este contenido que enseña como mutilar, atacar y hasta asesinar seres humanos?
Propaganda anti-cubana en Twitter que afirma que los cubanos disparan a venezolanos. Twitter esta muy ocupado en remover boberias Trompistas en vez de remover estas lecciones de violencia urbana.
Hace poco el opositor Oscar Elias Biscet dijo en una entrevista que esperaba por una pronunciación de Trump para este 20 de mayo. El no es el único que desea la intervención de los Estados Unidos en Cuba, pero Trump lo que está pensando ahora es en su primera gira internacional. Él visitará Israel, el Vaticano y Arabia Saudí, para según él mismo ha dicho, unir al islam, al judaísmo y al cristianismo en contra de la intolerancia y el extremismo radical.
No es bueno para los Estados Unidos que desaparezca la libertad de expresión en el sur de la Florida. Miami esta a punto de convertirse en una ciudad tercermundista de derechas , completada ya con un tráfico vehicular agresivo y anárquico de centro américa con el loco PUSH PUSH PUSH de USA.
Aquí ya se organizan actos ilegales frente a residencias privadas. Aquí las turbas derechistas expulsan a personas de los restaurantes por causa de sus ideas y de sus empleos. ¡Que nadie se asombre de que en defensa propia alguna víctima dispare un arma de fuego al temer por su vida y se pierda la paz (recordemos que aquí es legal portar armas) como en otros lugares! Ya es hora de cambiar visiones, de poner paz entre los hombres y de renunciar a la violencia política para resolver disputas.