Una crispada avanzada de radicalismo anti-comunista trata por todos los medios de presentarse ante la emigración cubana por estos días como alternativa para Cuba. La mayoría se educaron en la isla y cambiaron de bando tras la caída del muro de Berlín, emigrando a sociedades opulentas desde donde se presentan como “luchadores por la libertad y amantes del capitalismo neo-liberal” al mismo tiempo que tachan de agentes de la inteligencia cubana a todos los que tienen una opinión contraria.
Uno de ellos es Orlando Pardo, que asegura en un vídeo la descabellada idea de que Alez Otaola (homosexual de extrema-derecha muy activo en las Redes Sociales) es el “enemigo público número uno de la Revolución cubana” mientras le celebra a dicho sujeto, el hecho de publicar en el Internet correspondencia y videos privados del periodista cubano Edmundo García, con intención más que evidente de destruir su reputación moral debido a su ideología.
Alex Otaola a quien he defendido en el pasado, públicamente ha tenido la desvergüenza de condenar moralmente un video de carácter erótico supuestamente robado al periodista, como si fuese el tal Otaola un inquisidor medieval atento a lo que las personas hacen en su ámbito privado. Alex debe saber que durante siglos y siglos la mayoría de las personas en diversas culturas consideró las prácticas homosexuales como una grave degeneración moral que incluso atentaba contra el orden del universo creado por Dios. Él no sólo es homosexual, sino que explota su orientación con mucho alarde. En sus vídeos lucrativos que tantas personas ven en todas partes hace alardes extravagantes de su orientación sexual ¿Por qué entonces le niega el mismo derecho sexual de forma tan escandalosa a otras personas heterosexuales?
Sin lugar a dudas el objetivo es el de atacar el honor del periodista cubano que ha declarado en el pasado ser un admirador de la figura de Fidel Castro. Si Edmundo García cayó o no en una emboscada tendida por reformistas neo-liberales de la inteligencia cubana, o por la CIA o por una prostituta alquilada por exiliados en Miami no es importante, como tampoco debe ser importante su vida sexual privada. Ninguno de nosotros tiene derecho a ser un mira-huecos, y el grave atentado a la privacidad cometido por el homosexual-moralista-anticomunista, solo nos muestra hasta donde están dispuestos a llegar los enemigos del nacionalismo-revolucionario cubano con tal de sepultar el legado de Fidel Castro en el pensamiento político del cubano en la isla y en las izquierdas en todo el mundo.
La gente del proyecto anti-cubano CubaDecide tiene simpatizantes en la sociedad política cubana y no solo en la disidencia-mercenaria. Hay gente con poder dispuesta a negociar a espaldas del pueblo de la isla con los enemigos de la soberanía cubana. Hay gente que duda, que se estremece ante el premio y el castigo que anuncia Trump y ya esta pensando en sentarse a negociar la derrota imaginada.
Orlando mencionó mi nombre en su vídeo de odio, y trata de asociarme al nombre de Mariela Castro, a pesar de las distancias culturales, políticas e ideológicas entre ambas. Este truco de asociarme a los comunistas no es exclusivo de él. Es un recurso barato de propaganda simplista dirigido a la comunidad cubana emigrada a través de los medios privados en Miami. Esos medios no disponen de mucho tiempo para el debate serio o el pensamiento critico, y no soy la única que lo ha sufrido aquí.
El fundamentalismo neo-liberal del cubano Orlando Pardo es una enfermedad de la mente que contagia, que infecta a las personas vulnerables, a los caídos en desgracia. Es un virus cultural nacido en los días tristes del Periodo Especial. Un virus que corroe el orgullo patrio, que desprestigia todo lo nacional, que difama a la mujer cubana y que promueve el nihilismo, el pesimismo y la decadencia moral al mismo tiempo que condena moralmente a quienes no se dejan arrastrar por su suicida tendencia. Orlando dice que Edmundo Garcia no es una persona, porque quizás en secreto se tiene lastima a si mismo y no cree ser una persona humana. El odio del cubano al cubano, no es exclusivo de nuestro escenario antropológico. Otros pueblos lo han sufrido en tiempos de crisis.
Orlando afirma en el vídeo que a Edmundo García solo le queda como destino el suicidio, lo cual dice mucho de su intolerancia apasionada hacia otros. También recomienda que hay que perseguir a todo izquierdista cubano y acosarlo junto a sus familias ya sean ancianos enfermos o niños donde quiera que estén y sacar a la luz sus vidas privadas. Eso es condenable, porque un niño no tiene la culpa de lo que haga un pariente, y hay leyes y costumbres que no lo van a tolerar. Ojo con esta nueva derecha llena de odio y poca compresión hacia el otro.
Sólo el amor puede llevarnos de la mano a un futuro mejor.