Como a la periodista Maria Elvira durante años los intransigentes de Miami le criticaron injustamente que entrevistó a Fidel Castro, un amigo polÃtico antes de viajar para encontrarme con un polémico ministro extranjero, expresó cierta vacilación prudente. La tradicional naturaleza de esta comunidad condena cualquier acercamiento con aspecto diplomático hacia Cuba. Hay mucho temor de parte de muchas figuras publicas y personas privadas con respeto a una practica civilizada; el dialogo. Fui con plena conciencia de que el hecho de pararme frente al ministro de relaciones exteriores de Cuba, Bruno Rodriguez Parilla, seria interpretado por los reaccionarios como prueba definitiva de que soy una “agente castrista” por varias razones. Les comparto algunas:
- Mis dos abuelas viven en Cuba y me preocupa como la hostilidad de esta administración les afecta.
- Para el bien de los 11 millones de cubanos, los emigrados debemos pedir reconciliación no guerra.
- Como periodista, no quise pasar la oportunidad de conocer a los diplomáticos del consulado.
- Como activista no quise perder el chance dar un ejemplo positivo de intercambio civilizado.
Ustedes saben que soy irreverente frente a las groseras opiniones que contradigan mis principios más sagrados. Ya saben, no alimenten a los trolls. Aunque algunos ahora creen que tienen la “evidencia empÃrica” de mi supuesto socialismo, eso no es importante cuando con tu acción (no solo palabras) puedes actuar lo que predicas y conversar con cualquiera, de una forma constructiva, para poco a poco favorecer un dialogo nacional donde incluso–siempre tanto el pueblo cubano lo quiera asÖla decisión de ellos de sostener su Revolución este abierta a discusión, al igual que si mañana la vasta mayorÃa de los estadounidenses deciden que la constitución ya es un documento obsoleto…aunque claro, no lo recomiendo. Suelo valorar más a las personas y su calidad de vida que documentos, por muy nobles o perfectos que sean o hayan sido en su contexto.
El pueblo cubano en la isla de Cuba pudo saber a través de Moderna (9955 kHz de WRMI) del encuentro en New York entre diplomáticos cubanos y la emigración. El pueblo de Miami (que no escuchó a WRMI) no se enteró, porque los medios privados en el sur de la Florida lo censuraron.
Tampoco la entidad federal que controla Radio y TV Martà comunicó la noticia de que la hija de un antiguo preso polÃtico, habló con el ministro de exteriores. Ni los portales digitales de la “nueva derecha” en la red de noticias creyeron que debÃan contar lo que ocurrió, asà como jamás han contado como yo pedà por la libertad de los presos polÃticos cubanos e incluso preparé una campaña audio-visual para TV antes de que Raúl Castro liberara a los 75. A pesar de tanta censura sufrida en la emigración, los enemigos de la reconciliación entre cubanos continúan acusando a Cuba de censurar noticias. No niego que eso pase también, pero molesta la manipulación más cercana. Viajar a New York sale caro, pero al menos no hay que pagar tantos cientos de dólares por un pasaporte cubano, lo cual es un alivio. Eso si, hay mucho estrés, se duerme muy poco y Conversar con el Ministro del Exterior Bruno RodrÃguez en medio del acoso que están sufriendo los diplomáticos cubanos por parte de la administración actual es todo un reto si vives en este paÃs y mantienes una militancia cÃvica a favor de la paz y el respeto entre paÃses soberanos.
No solo es agotador hacer un viaje a New York, sino que desalienta ver como la conducta irresponsable de Trump tienen repercusiones en las libertades individuales de los estadounidenses, que no solo les está prohibido viajar a Cuba, sino que son molestados si se acercan al consulado cubano, como nos pasó a mis hermanos y a mi al asistir a la invitación que se nos hizo. El consulado será la propiedad de Cuba, pero las calles son de aquÃ.
Lo ultimo que yo quiero oÃr decir a un empleado publico (nosotros pagamos los salarios del servicio secreto) es cualquier truco retórico para intentar intimidar a un adolescente estadounidense que hace solo unos dÃas era un menor de edad que ama a su paÃs. Mi hermanito es lo suficientemente inteligente para saber que cuando un adulto le urge a unirse al “lado bueno de la historia” o que le pide que borre sus inocentes fotografÃas de turista, está en su derecho a negarse a cooperar. Claro, ellos si cooperaron, y me alegro que lo hicieran, pero aún me parece desmedido correr sus identidades nacionalmente para averiguar si eran prófugos de la ley…por fotografiar rascacielos en una intersección publica, donde casualmente de lejos, se veÃa un ser humano que dio la casualidad que era un agente encubierto. Uno de los agentes tuvo incluso el mal gusto de tomarse el atrevimiento de juzgar el valor artÃstico de las fotos suyas como si fuese un socio común y no un representante de la ley. No somos amigos, asà que no me trates con tanta confiancita, y mucho menos para criticar lo que no te concierne.
En estos fotogramas se ve como los agentes del orden a la entrada de la Misión Permanente de Cuba en New York molestan a mis hermanos fotógrafos en medio de una Directa por youtube. Los agentes molestos supuestamente por ser fotografiados estuvieron presionaron a mis hermanos para que borraran las fotos de sus rostros al mismo tiempo que usaban los pasaportes de mis hermanos para averiguar por sus datos personales (records). Más tarde los agentes se retiraron cuando se dieron cuenta de que estaban saliendo en la transmisión  en directo para mis seguidores de las redes sociales.
Ya que luego corrieron unos mal intencionados rumores de que yo ni estaba invitada ni que pude entrar, entonces afirmo (aunque las fotos deben ser la suficiente evidencia) de que si, nosotros tres si entramos al consulado para asistir al evento.
New York para mi es una vieja señora elegantemente cosmopolita y liberal que abrió sus brazos a todo tipo de emigrantes y con eso prosperó. Hace poco dos diplomáticos cubanos fueron expulsados y los que permanecen en la Misión Permanente ante Naciones Unidas no pueden salir de cierta área en Manhattan debido a la creciente hostilidad de la administración de Trump. Ya es hora de un nuevo acercamiento entre Estados Unidos y Cuba que no caiga en los errores que hicieron fracasar la normalización del 2014.
Aquà les comparto el vÃdeo del Programa de radio que salió al aire en la noche del pasado lunes (WRMI-9955 kHz).